miércoles, 21 de mayo de 2008

ArtE en un PuntaL

Hoy al verme rodeada de puntales en una de mis visitas me he sentido como si estuviera en una minúscula sala hipóstila, en la que cada puntal hacía la vez de un escuálido pilar. Y me he acordado de una anécdota curiosa: me explicaba un conocido hace unos meses, que un cliente suyo, arquitecto, había hecho apuntalar unas vigas en mal estado en una habitación de su casa de veraneo, a la espera de buscar una solución. Por lo visto se acostumbró a ellos y tuvo la ¿genial? idea de hacerlos partícipes de la decoración de la estancia, y decidió no quitarlos ni arreglar las vigas (muy mal tampoco debían de estar). Para sorpresa de su mujer, convirtió los puntales en pilares improvisados. Los ha "customizado" pintando cada uno de un color, colgando apliques y fotos, e incluso alguno ya forma parte de una escultura que él mismo hizo para tal fin. ¡Qué envidia me da que a nosotros en la facultad no nos hiciesen desarrollar esa imaginación creativa para inventar arte de cualquier elemento cotidiano!

jueves, 8 de mayo de 2008

¿tocar o besar?


Tocar y besar. Aunque sin hacerlo del todo, sino con una caricia o con un beso que no llega a consumarse como tal…
Sin hablar, sin exponer el deseo como reclamo, sino como una confidencia. Espontánea. Impredecible.
Y esperar impaciente, dando rienda suelta a la autocomplacencia, y a la pasión, imaginando cuando juego que mi juguete eres tú. Reservar tantos besos que, a fuerza de no consumarlos, acaban escapando de los labios, perdiéndose en el infinito.
Toca estas manos que a veces buscan en mi cuerpo lo prohibido. Roza esta lengua que a veces lame, que a veces besa, que a veces entra y sale de tí…
Déjame oir sólo tus gemidos, como si mi mundo se hubiera detenido.

sábado, 3 de mayo de 2008

(canibalismo)

He leído que existe un país donde constitucionalmente está escrito que se prohibe el canibalismo entendido como tal. Y me surge una duda ¿en el resto del mundo, donde no está escrito, entonces se le da plena libertad? El moderno "canibalismo", tal y como yo lo entiendo: mediático, politico, cibernético y social, debe ser fruto de la avidez devoradora de querer más que todos poseemos, para intentar imponernos en cualquier ámbito de nuestra paradójica y autodestructiva existencia.
No en vano, intento exprimir todos los detalles que lentamente voy descubriendo con cada nuevo latido, haciendome resurgir de mis propias cenizas cual ave fénix de estar por casa, para no ser devorada por mi entorno.
Cada parpadeo es una fotografía del momento presente, en coyuntura con esa visión pasada de los instantes ya vistos, ya vividos y, porque no, casi olvidados.
La vista desarma al cerebro en sus impulsos involuntarios, pero controladores del relevo argumental de ese instante desprovisto de importancia .
Cada palabra es una exhalación de un trozo de vida, que con cada letra se escapa de ese recinto cerrado que sellan mis labios, intentando retornar en vano con cada inspiración, con cada bostezo que la expulsa aún mas fuerte.
La boca arma al cerebro con frases anárquicas que se ordenan y organizan para articular mi diálogo, aunque éste sea silencioso.
El sacrificio difiere de las sensatas decisiones que me amparan, y el mismo bizarro empeño que me mueve también me delata. Pero llegado a este punto, corro a mi rincón resguardado para contemplar la transparencia del mar en calma, observando el juego de colores sobre las rocas, supuestamente escondidas bajo el agua.